Archivo de la etiqueta: desahucio

El Gobierno dice que nos ayudará a pagar la hipoteca

Flipa con la moto de ayudas que quiere vendernos el Gobierno

Flipa con la moto de ayudas que quiere vendernos el Gobierno

El Gobierno de Zapatero se plantea, por fin y ahora, mejorar el tinglao hipotecario.

Para buscar excusas con las que agotar esta legislatura mientras parece que se hace algo para ayudarnos, el Gobierno dice que los Ministerios de Economía y Justicia, en comandita con el Banco de España, están estudiando medidas para que no nos arruinemos pagando las hipotecas.

Entre lo que les ronda la cabeza no está que se vaya a cancelar la deuda entregando el piso al banco, lo que se conoce como dación en pago.

Sí piensan en aumentar la cantidad mínima de ingresos que se puede embargar a una familia, cifra que ya subió en 2010. También en eliminar las cláusulas suelo y techo, limitar al 25% los ingresos que dedicamos a pagar deudas, obligar a cajas y bancos a que nos informen más y mejor de la gran responsabilidad que contraemos al firmar una hipoteca y todo lo relacionado con la misma.

Se plantean que la empresa que tase inicialmente el piso sea independiente y no del banco, como ocurre ahora. También, que tengamos que pagar menos del 29% de intereses de demora que tendríamos que pagar si nos ejecutaran la hipoteca ahora.

Además, quieren que el banco no pueda quedarse con el piso por el 50% de su valor de tasación, teniendo nosotros que pagarle el resto, sino que el banco pague más dinero por la casa que se queda, y nosotros menos.

El Gobierno piensa en plazos más largos en las ejecuciones hipotecarias y que la gente que echan de su casa pueda quedarse pagando un alquiler.

Lo único que les preocupaba hasta ahora y, sinceramente, lo único que en el fondo les sigue preocupando aunque no lo digan abiertamente, son los bancos que financian a sus partidos.

Si perdemos el empleo, llegamos a fin de mes, podemos comprarnos un piso o pagárselo al banco es algo que no les quita el sueño. Y debería, pues están en el poder o en la oposición porque les hemos votado para que representen nuestros intereses y no los suyos propios. Pero eso es un bonito cuento de los que ya no se tragan ni los niños.

Estas medidas serán muy bienvenidas siempre que contribuyan a que nos podamos enfrentar mejor a la jungla de hipotecas en la que sobrevivimos. Sin embargo, para miles de familias llegan demasiado tarde y después de que perdieran la voz gritando los abusos de los bancos y pidiendo justicia.

De momento solo son buenas ideas, buenos propósitos como dejar de fumar, adelgazar y aprender inglés que cada vez que comienza un nuevo año juramos y perjuramos que vamos a cumplir. Estoy deseando ver si, como ha dicho el presidente del Gobierno, pasan de la fantasía del buen samaritano a la realidad en las próximas semanas. Y es que hechos son amores y no buenas razones.

Quiere que creamos que le importamos y que nos va a ayudar, aunque a mí me parece que es un humo más negro que el que acechaba en la serie Perdidos.

Esto no hay quien se lo fume ni como pipa de la paz.

Los indignados impiden que echen a la gente de su casa

Del barco de Chanquete, ¡no nos moverán!

¡Del barco de Chanquete, no nos moverán!

Se llama stop-desahucio y es el deporte de moda entre los indignados e hipotecados para evitar que a la gente se la eche de su casa porque al dejar de pagar la hipoteca, el banco la ejecutó y, meses después, el juzgado dijo que tenían que desalojarla.

Los miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), que nació en Barcelona y ya se ha trasplantado a Madrid, Valencia y otras ciudades, llevan impidiendo que echen a gente de su casa desde 2009.

Ahora han ganado repercusión y éxito porque los indignados que han dejado las plazas se les han sumado para dar guerra a los bancos.

Juventud sin Futuro con su lema sin casa, sin curro, sin pensión, sin miedo, el movimiento 15-M, Democracia Real Ya (DRY), asociaciones de vecinos y otras organizaciones se les han unido para demostrar que la unión hace la fuerza y que con 50 personas se puede evitar que echen a alguien de su casa, por mucho que lo haya dicho un juzgado.

Han llegado a parar 4 desalojos en un día, incluso 8 en una semana, y no están dispuestos a parar. Frenan desahucios de gente mayor, a veces con enfermedades crónicas y/o generativas, que están postrados en cama, con personas dependientes a su cargo, o simplemente familias o personas solas que se vieron ahogadas por las facturas o que avalaron a sus hijos y ahora el banco les quita el piso para cobrarse la deuda.

Con caceloradas, gritos y protestas, y la cabezonería de plantarse en la calle, enfrente del portal en plan del barco de Chanquete no nos moverán, consiguen evitar un desalojo hasta varias veces y ganar tiempo, mientras piden a la Administración que realoje a la gente en una vivienda digna y que se imponga la tan traída y llevada, la tan ya apenas probable dación en pago (cancelar la deuda hipotecaria con el piso).

De 2008 a 2010, se ha ejecutado la hipoteca de 245.627 familias, de las cuales, 108.475 recibieron también la orden de desahucio. ¡Pero si solo en este primer trimestre del año ha habido más de 20.000 ejecuciones hipotecarias y más de 15.000 órdenes de desahucio!

Lo que hacen estos colectivos es una gota en el océano de la desesperación, pero trae la suficiente esperanza, aunque sea a poca gente, como para darles fuerza a continuar, y desde luego es más que no hacer nada y no conseguir parar ni un solo desahucio.

Además de luchar contra lo que consideran injusticias sociales y económicas, la motivación de los que participan es el típico hoy por ti y mañana por mí. Es decir: yo voy a parar tu desalojo y mañana espero verte a ti parando el mío. No es que vea yo ningún interés, pero sí que es cierto que la solidaridad sin necesidad de acuerdos verbales ni escritos ha nacido, y eso revela por qué se rebelan contra los bancos y el sistema hipotecario.

Algunas hipotecas ya se firman con un seguro de protección de pagos, que para muchos llega demasiado tarde. En vez de las cláusulas abusivas, podrían haberse generalizado estos seguros y así ahora la gente que ha perdido el trabajo o que simplemente no ha podido aguantar el subidón que pegó el Euríbor hace 3 años, habría podido pagar su casa y la seguiría conservando. Incluso los bancos habrían salido ganando dinero y no pisos, que ahora no saben por dónde meterse.

Esto en vez de matar moscas a cañonazos, es atacar a los cañones con moscas, pero como son moscas cojoneras, algo es algo.

Unos tanto y otros tan poco

Ya se sabe que la Justicia es loca, ciega, sordomudaaa... Como la canción de Shakira.

Ya se sabe que la Justicia es loca, ciega, sordomudaaa... Como la canción de Shakira.

Apenas ha empezado el año y ya hay movida con la desgravación de la hipoteca.

Como ya sabes, el Gobierno la ha suprimido a quienes se hipotequen desde ya y ganen más de 24.000 € netos al año, dejando que se desgraven algo los que ganan entre 17.700 y 24.000 € netos.

Como no toda la clase política está de acuerdo, en España hay autonomías (de algo nos tendría que servir tanta duplicidad de Administraciones) y hay gente, como Esperanza Aguirre -presidentísima de la Comunidad de Madrid- que está deseando oír qué dice Zetapé para hacer lo contrario, pues ahora no todo el mundo va a desgravarse igual la hipoteca, y no por cuestiones meramente de cuánto ganas sino de dónde vives.

Navarra, País Vasco y Madrid han dicho que, cobren lo que cobren, los suyos sí podrán desgravarse la hipoteca, en el tramo autonómico de la Declaración de la Renta, o sea el 7,5% de un máximo de 9.040 euros. ¡¡Albricias!! Y si no vives allí, ajo(erse) y agua(ntarse).

En esta vida, que no es justa, unos tienen mucho y otros tan poco… O si no que se lo digan a las casi 300.000 familias embargadas -118.000 solo en 2010- embargadas durante la crisis.

Para que esto ocurra menos y para que si ocurre sea menos traumático, se está pidiendo a gritos que baste con dar la casa al banco, sin arrastrar una deuda. En cambio el Gobierno, ahora por boca de Elena Salgado, sigue erre que erre con que ni hablar de la peluca, no vaya a ser que los bancos salgan perjudicados. Que hubiéramos sido más prudentes, pidiendo menos pasta, dice la Salgueitor.

El colmo de los embargos es el de Eleuteria Umpiérrez, una octogenaria con nombre de abuelita de TBO, con la que se ha armao una buena porque, enferma y sola, quieren ahuecarla de su casa porque hipotecaron su propiedad sin su conocimiento y ahora Caja Rural le reclama.

Acorralada como Rambo, al final se quedará por orden judicial en su casa de Corralejo (Fuerteventura). Hay que ser mamón para echar de su casa a una venerable enferma y postrada en cama, cuando ella ni siquiera debe nada a nadie, o al menos nadie se lo había comunicado porque se ha trapicheado a sus espaldas.

Bueno, hay que ser mamón para desahuciar a alguien que sabes que intenta pagar y no puede, pero ya sabemos que el único órgano vital y el único músculo fuerte que tienen los bancos es la caja. Lo demás, no lo busquéis: ni existe.

Bye bye a las hipotecas a la americana

Con los bancos ya no se atreve ni Don Quijote

Con los bancos ya no se atreve ni Don Quijote

Y vuelta a empezar. No hace ni dos telediarios que os decía que, por boquita de Pepiño Blanco, el Gobierno había dicho que nanay de que la entrega de la vivienda sea suficiente para saldar la deuda hipotecaria tras el embargo, cuando anteayer en el Congreso se vuelve a abordar el tema, con raquíticas esperanzas para nosotros.

Tras el subidón de ganar las elecciones -y por fin gobernar- en Cataluña, Convergència i Unió (CiU) vuelve con su particular batalla de las hipotecas, presentando en el Congreso de los Diputados una moción que se ha aprobado con la abstención del PP y el apoyo de PSOE.

Por pichicienta vez, CiU pedía que el piso sea suficiente pago al banco cuando dejamos de pagar la hipoteca y que hay seguros de protección de pago que eviten que nos desahucien cuando estamos en situación de incapacidad temporal o en el paro. ¡Fuera buitres!

También por pichicienta vez, el Gobierno ha dicho que estudiará el tema, mojándose cada vez menos, puesto que esta vez vuelve a cerrar completamente la puerta a la dación de pago, que en Estados Unidos triunfa más que Los del Río con Macarena. La dación de pago es entregarle el piso al banco, saldar la deuda y que nos deje descansar en paz (RIP).

Aunque esto no lo hemos conseguido, y todo apunta a que no lo conseguiremos salvo que a los políticos se les olvide que los bancos les prestan pasta, sí que se han acordado algunos pequeños logros, que ya veremos si llegan a buen puerto o se quedan en agua de borrajas:

- Que cuando dejamos de pagar la hipoteca no se nos pueda meter mano en otro patrimonio que no sea el piso. Hasta ahora nos embargan el piso y lo que sea necesario con tal de cobrar la deuda. Qué buitreo. ¡Carroñeros!

- Que no nos embarguen el piso si estamos en proceso concursal, o sea en el equivalente a suspensión de pagos de una empresa y acosados por todo tipo de acreedores y chupasangre

- Que haya seguros de protección de pago de verdad en lugar de cláusulas guarras que nos sacan hasta los higadillos (ojalá, está por ver)

- Aumentar las cantidades de sueldo, pensión u otra retribución que percibamos que no nos pueden embargar. Hasta ahora te dejaban en bragas y sin estufa, para sofocarte los calores del disgusto. ¡Gentuza!

- Mediar entre el banco y los que nos quedamos sin casa por el embargo, fomentando que nos podamos quedar de alquiler aunque estemos desahuciados

Dentro de lo malo que es un embargo, qué bonito suena todo esto, pero ya se sabe qué es lo que tira más que dos carretas: en este caso las pesetas, los leuros que los banquetes dan a los politiquetes. Qué asquete.

¡¡Feliz Navipeich!!

2011: ¡Morosos a la vista!

Señor, vienen dos morosos a pedir hipoteca, señor. - Tontáinez, apunte y dispare si se acercan.

Señor, vienen dos morosos a pedir hipoteca, señor. - Tontáinez, apunte y dispare si se acercan.

La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) cree que la morosidad va a repuntar en 2011, debido a que en esta mierda de economía que surfrimos, no hay trabajo para todos, nos quitan las deducciones y escasea la pasta para pagar la hipoteca. Fedea vaticina que cerraremos el año en el 5,5% y que al año que viene llegaremos al 7%.

Si a esto le sumamos que la Agencia Negociadora de Productos Bancarios opina que este año batiremos el récord de ejecuciones hipotecarias, con 118.000, cada vez se van a dar más situaciones como ésta:

En un banco, un día cualquiera por la mañana.

- Sr. Róñez, cierre la puerta que ya vienen dos morosos a pedir hipoteca.

- Pero, Sr. Tacáñez,  ¡si tienen una pinta estupenda!

- No sé fíe, no se fíiiiiieeee, se ponen el traje de los domingos, falsifican los contratos y, con la sonrisa que han practicado toda la semana, vienen a pedigüeñear dinero como si nos sobrara.

- Mmmm… ¿¿??

- Cierre, Róñez, cierre… ¡Que se acercan!

- El otro día uno trajo la hoja de vida laboral y todas las nóminas sin habérselo pedido. Me hizo sospechar… En el último seminario antimorosing que impartieron en la central del banco nos dijeron que hay que tener mucho cuidado con estos. Dime de qué presumes y te diré de qué careces.

- Claro que sí, Sr. Róñez, aquí no estamos para pagarle el piso a nadie, ni para hacer obras de caridad. Que se vayan a una ONG o a pedir a sus padres.

- Contra el vicio de pedir, la virtud de no dar, y aquí debemos ser todos muy virtuosos.

- Y muy cuidadosos, porque a la que te descuidas te han sacado dinero hasta para el funeral del canario.

- Solo debemos abrir la puerta y ser amables con los que compren un piso embargado a otros morosos.

- Aaaah… Por eso el regalo de Navidad del banco este año es un predictor morosil de última tecnología, capaz de detectar a un futuro deudor a más de 100 metros.

Mientras, en la Calle de los Buenos Deseos, esquina con el Paseo de la Sinrazón y la Amargura…

- Cari, mira, otro banco. ¿Entramos a preguntar?

- ¿Para qué, mi vida? Nos van a dar otra vez con la puerta en las narices.

- Al menos significaría que nos han abierto la puerta, no como en los últimos 15 bancos, que parece que nos huelen a más de 100 metros y, según nos acercamos, cierran a cal y canto. ¡¡Serán hijos de su madre!! Si luego nos hacen firmar tropecientos seguros y se van a forrar a intereses durante años. ¡Si un español lo último que deja de pagar es el piso! Ni que le estuviéramos pidiendo para el entierro del canario.

- He lavado y planchado el traje que me regalaste para las entrevistas de trabajo, me he maquillado y llevo toda la semana ensayando la pose de te voy a devolver hasta el último céntimo, ¡dame la hipoteca!

- Es que ni llevándoles la hoja de vida laboral y todas las nóminas desde que hice la Comunión. A esta gentuza chupasangre ya no les vale con nada.

- Cari, he oído por ahí que si pedimos para uno de sus pisos a lo mejor nos dan la hipoteca.

- ¡¡Pero si aprobamos la oposición hace ya cinco años!! En el Ministerio se chotean de mí porque tengo casi 40 y todavía vivo con mis padres.

- No, si al final Jesucristo fue un avanzado, con eso de estar con sus padres hasta los 30 años. ¡Quién pudiera solo hasta los 30!

- Bueno, a ver qué tal se nos da en 2011.

¿Vale con entregar el piso cuando ejecutan la hipoteca?

Vaya mal rollo cuando, al dejar de pagar la hipoteca, al banco hay que darle algo más que el piso

Vaya mal rollo te entra cuando, al dejar de pagar la hipoteca, al banco hay que darle algo más que el piso

O vale o no vale, pero ¡¡ya vale de marearnos!! A estas alturas, tras meses de incertidumbre (a veces es peor no saber algo que saberlo), seguimos sin tener claro si por fin los partidos políticos aprobarán en el Congreso que vale con entregar el piso al banco, en lugar de tener que seguir pagando, cuando ejecutan la hipoteca que nos dieron para comprar el piso porque hemos tenido que dejar de pagarla.

El 16 de junio, y mira que ya ha llovido y echo sol desde entonces, se aprobó en el Congreso una proposición no de ley de IU e ICV, con el voto en contra del PSOE, en la cual se le susurraba al Gobierno que tenía tres meses para ponerse las pilas en determinar si al final vale o no vale con entregar el piso al banco cuando ejecutan la hipoteca, como en Pestardos Unidos.

Esto es una cosa muy seria y no estamos como para que hoy sí valga, mañana se repita la votación y no valga, pasado mañana lo hayamos pensado mejor (o no siquiera pensado) y nos desdecimos… Un poco de seriedad que la casa es lo básico.

A día de hoy, los embargos siguen disparándose, la gente sigue perdiendo la casa, el dinero y la paciencia, y los bancos siguen haciéndonos la puñeta porque nos fuerzan a comprar sus pisos si queremos ver un euro para una hipoteca. Al final pasará lo de siempre: ganarán los de siempre y perderemos lo de siempre, pero no por ello debemos dejar de luchar por lo que es justo y lo que es necesario.

¿Quién paga ahora las consecuencias de las hipotecas que se dieron sin din(ero) ni don(aire)? ¿Los culpables, que son los ricos y poderosos? Nooooooo. ¿Los mayores perjudicados, endeudados hasta las trancas? Síiiiiii. Los grandes nunca pierden y menos si son los bancos, a quienes los políticos les piden y deben tanto dinero y favores.

Estamos en clara desventaja con ellos, tanto con políticos como con bancos, aunque al final dependen de nosotros: de que depositemos el dinero y les votemos. Lo malo es que si nosotros no hacemos nada por nosotros mismos, nadie lo hará por nosotros, lo cual queda bonito decir pero es complicado de hacer porque no queremos salir de nuestra burbuja de bien o malestar. Estamos en un atolladero.

Podremos estar seis meses sin pagar la hipoteca

Menudo balón de oxígeno que nos han dado para seguir aguantando el tirón de la crisis

Menudo balón de oxígeno que nos han dado para seguir aguantando el tirón de la crisis

El Congreso nos acaba de poner una inyección de moral, aliento y esperanza con la aprobación de una propuesta no de ley de UPyD, consensuada con el PP, para duplicar el tiempo que podemos estar sin pagar la hipoteca antes de que nos embarguen el piso.

Hasta ahora, al tercer mes de dejar de pagar la cuota el banco te ejecutaba la hipoteca. Ahora podremos estar sin pagar la hipoteca hasta seis meses antes de que eso ocurra.

Aunque gran noticia, es un poco de pan para hoy y hambre para mañana, pero menos es nada y para muchas familias será el tiempo suficiente para salvar la casa.

Fastidia enormemente, y duele, perder algo por lo que has estado luchando tanto tiempo, que has estado pagando mes tras mes, para lo que has trabajado duramente, donde has depositado tanta ilusión, alegría y esfuerzo, para que luego venga el usurero del banco a quitártelo de un plumazo porque te han venido mal dadas económicamente o simplemente te has organizado algo peor de lo recomendable.

La morosidad en España, que ya supera el 5%, está en límites escandalosamente altos en comparación con años anteriores a la crisis.

De la opinión de los bancos no creo que tengamos que preocuparnos. Antes de aprobar nada, los políticos se habrán cerciorado de que las entidades financieras no se enfadarán; es más, estarán de acuerdo, porque con tanto embargo han dejado de cobrar intereses y de tener dinero en efectivo, porque los pisos embargados se acumulan sin venderlos.

A los bancos les viene de perlas. En lugar de tener que conceder aplazamientos, la deuda queda aplazada seis meses y si para entonces no has pagado, te meten mano en ese momento, pero no antes.

Lo de tener hipoteca y atravesar dificultades económicas ya es casi como tener cáncer: te quedan seis meses. Si tras los seis meses dejas de pagar, pasas al corredor de la muerte y te ejecutan la hipoteca; si pagas, pasas al de la suerte y te quedas en el piso, que no con el piso (aún).

Con el piso te podrás quedar cuando hayas pagado hasta el último céntimo de lo prestado y de los abultadísimos intereses al banco. Si desde el principio nos dijeran cuánto van a ganar con nuestra hipoteca, nos echaríamos las manos a la cabeza, nos iríamos pata abajo y de tan abajo que estaríamos, nos iríamos al carajo.

Nadie quiere dejar de pagar si le quitan el piso, pero si no queda más remedio que morosear, bienvenido sea que nos den el doble de tiempo.

Los bancos embargan 360.000 casas en 4 años

Los bancos, vigentes campeones mundiales de desolación y embargo

Los bancos, vigentes campeones mundiales de desolación, embargo y desahucio

Sabemos que últimamente a los bancos no hay quien les gane embargando. Lo que no sabemos es que entre 2007 y 2009 el despiporren alcanza los 178.000 pisos embargados. Glup.

Teniendo en cuenta que en los tres años anteriores a 2007 solo habían embargado poco más de 47.000, la cifra es una barbaridad que, sin embargo, se queda corta ante la previsión de 2010, cuando se calcula que, tantatachaaaaaannn, se embargarán unos 180.000 pisos. O sea, un total de 360.000 pisos en 4 años.

Después de resoplar y secarme el sudor, debo aclarar que no lo digo yo sino que lo calcula el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), ese cuyo nombre parece más el de un partido comunista de país del Este que el de un organismo que sepa de sinjusticias y sinsabores.

Al Gobierno sí y por eso les ayuda, pero a mí no me da ninguna pena que los bancos lloren porque ya no saben debajo de qué manga, la de los gemelos de oro o la del rolex de brillantes, meterse los pisos -sobrevalorados hasta un 55%- que nos financiaron con intereses de los que se alarmarían hasta los mismísimos prestamistas judíos de las películas medievales.

Me gustaría que se los metieran por algún lugar que duela, lo reconozco, pero más me gustaría que no los hubieran embargado, dejando a miles de familias en la calle.

Con un poco más de paciencia y predisposición a negociar, hubieran sacado mucho más provecho. Se las hubieran podido dar de caritativos, que les encanta, y no hubieran engordado el stock que arrastra sus cuentas hasta el fondo con la misma fuerza que el Atlántico se tragó al Titanic. Y si los bancos val mal, todos vamos mal. Fastidia reconocerlo pero es así.

Los bancos pensaron que el negocio era redondo: doy hipotecas millonarias por pisos extravalorados, cobro un dineral en intereses, pongo unas condiciones horrorosas y, si al final no pagan, me quedo con todo: el piso, el dinero y los intereses que ya me han pagado, y el dinero que aún les queda por pagar.

¡Cobrando más del doble de lo que prestaron porque luego el piso lo venden!

Es que tiene narices que hayamos tenido que estar pagando el piso después de que nos lo hayan quitado y nos hayan echado de él. Si hasta la propia palabra, desahuciar, es bien fea…

Y son así porque quieren y embargan porque les da la gana, porque los ciudadanos apenas les hemos dado disgustos: los propios bancos han reconocido que desde 2001 han recuperado el 90% del dinero prestado.

¿Verdad que dan ganas de ejecutarlos a ellos? En el buen sentido de la palabra, claro… Como ellos, metiendo el cuchillo pero con Responsabilidad Social Corporativa.

Bálsamo para escocidos por el banco

Vivir en una zona devastada es una solución temporal que siempre nos recordará la tragedia

Vivir en una zona devastada es una solución temporal que siempre nos recordará la tragedia

Si cuando éramos pequeños nos daba miedo apagar la luz por si venía el hombre del saco, ahora nos da miedo no pagar la hipoteca por si viene el banquero con otro saco para darnos con él.

Cataluña, que este finde ha estado diada con la Diada, es la comunidad donde, en los últimos tres años, un mayor número de familias (40.000) han perdido su casa por dejar de pagar al banco el préstamo para comprarla.

Si es que nunca nos entra en el coco… ¡Hasta que no pagamos hasta el último céntimo de lo prestado y de los intereses, la casa no es nuestra! Como nos dan la llave y vivimos en ella, olvidamos con facilidad que si dejamos de pagar la hipoteca, el banco la ejecuta y nos la embarga.

La culpa fue bastante del banco por prestarnos hasta para la peluquería del caniche, y bastante nuestra por pedir sin calcular cuánto podríamos pagar si subía el Euríbor. ¿El qué? Pues eso, que así nos va el pelo si solo nos interesan las ligas… Las de fútbol y las de las despedidas de soltera.

Perder la casa es una puñeta, sea de quien sea la culpa. Hace unos meses que se aprobó que tras la ejecución de la hipoteca por no pagarla, sería suficiente con que le entregáramos el piso al banco, y no como antes que aún le seguíamos debiendo dinero, aun habiendo entregado las llaves.

Pero al sindicato Comisiones Obreras (CCOO) no le ha parecido suficiente, y ahora propone un alquiler protegido para las hipotecas ejecutadas. ¿Un qué? Una fórmula según la cual, aunque entregues el piso por dejar de pagar la hipoteca, puedas quedarte a vivir en él pagando un alquiler.

O sea, que es seguir pagando aun habiendo entregado las llaves, pero con la ventaja de poder seguir residiendo en el piso, y sin el incoveniente y el disgustazo de tener que abandonarlo.

Me parece una gran idea, qué pena que no llegue más allá de estas líneas y quede en agua de borrajas como todo lo sindical hoy en día. Está bien que hagan algo por nosotros, que no se limiten solo a recibir pasta del Gobierno y luego clavarle puñales de juguete de cara a la galería.

Me pregunto si, además de la huelga general del 29-S, no deberían convocar otra para exigir condiciones justas en las hipotecas, un mayor acceso y más real al crédito y a la vivienda, incluso para hacer real este bonito propósito de inicio de curso. ¿A que sí?