Ah, sí… ¿Dais hipotecas?

El Ministerio SinCasitas reparte boletos para la noria de la vivienda: te puedes marear, quedar arriba, tocar fondo... ¡Sorpresa!

El Ministerio SinCasitas reparte boletos para la noria de la vivienda: te puedes marear, quedar arriba, tocar fondo... ¡Sorpresa!

Aunque el pasado enero se dieron un 3% más de hipotecas que en enero de 2009, el peor año con diferencia desde que empezó la crisis, no nos dejemos engañar: siguen sin darnos hipotecas.

En cuanto los medios, algunos políticos oportunistas y algunos ciudadanos incrédulos escuchan que algo que estaba mal ha subido, aunque sea una miajita, ya se ponen contentos y se agarran a eso como a un clavo ardiendo para hablar de recuperación porque lo de los brotes está más desfasado que la peineta de la Martirio.

Pero no nos estamos recuperando: para ello deberían acumularse cifras positivas durante un cierto tiempo, creando tendencia, y eso aún no ocurre.

Cada día que pasa el Gobierno alarga la previsión: antes era el último trimestre de 2009, después 2010, luego 2011 y lo último que les he escuchado es a principios de 2012, así que mi impresión es que no tienen ni idea y lo van alargando como Gallárdon la candidatura olímpica.

No dan hipotecas a pesar de las presiones externas de los ciudadanos y el papá-patrón Banco de España, que les ha reclamado más transparencia y provisiones, y porque tienen sus propias presiones: una cantidad de pisos sin vender más indecente que fumar colillas del suelo y una ingente deuda de los promotores inmobiliarios, dudosa de recuperar ni con el Monasterio del Cobro.

Las hipotecas que terminaron sus días en una subasta fueron récord en 2009 y volverán a serlo en 2010, siendo peor la situación para las cajas que para los bancos.

La Corredor, cómo no, va por ahí diciendo que el stock inmobiliario es un desperdicio. ¿Y ella qué está haciendo por solucionarlo? Eco, ecoooooo, eco, eco, eco…

Sin hipotecas no hay salida para el stock, sin trabajo y sin voluntad del banco no hay hipoteca, sin hipoteca no hay ganancia para el banco y sin personas con trabajo no hay quien compre casas del banco ni de promotores ni de angustiados vendedores de segunda mano.

Y en medio de todo esto, el BBVA diciendo Ven a casa (¿a cuál? ¿La de los tres cerditos?) en una absurda campaña para atraer hipotecas de otras entidades regalando 2.000 euros y jurando y perjurando Sí, damos hipotecas. ¿De verdad? ¿En serio? ¡Quiero verlo!

Hasta que no se deshagan de los pisos embargados no darán para más pisos. Todo es mentira. Una simple campaña de Irresponsabilidad Asocial muy Corporativa para lavar su imagen de tacañones y tíos gilitos. Pero si, después de muchos años ocupando el primer lugar, las quejas de usuarios sobre viviendas han bajado hasta el cuarto puesto con un 73% menos que en 2005. A ver… Si no hay hipotecas, hay menos pisos y por tanto menos reclamaciones. ¡Ahora la única reclamación es el acceso a la vivienda! Y las entidades financieras tienen la llave.

La cosa está tan mal que en Andalucía ha entrado en vigor una Ley del Derecho a la Vivienda. ¡Increíble! Yo creía que el derecho a la vivienda, digna por supuesto, ya estaba adquirido y que no era necesario aprobar una ley para garantizarlo ni exigirlo en los Tribunales. Esto nos da la medida de lo mal que está el patio, señores.

Yo ya he solicitado estudio en varias entidades pero, por si acaso, me he comprado un velo como el de Penélope, no vaya a ser que me toque esperar más de la cuenta…

El timo de la clase media

La clase media no es tan homogénea como parece y, para llegar a fin de mes, estira los recursos como chicles

La clase media no es tan homogénea como parece y, para llegar a fin de mes, estira los recursos como chicles

No hace falta que una encuesta nos diga que hemos visto, perplejos e incrédulos cómo cada euro nos cunde menos y cómo empeoran nuestra calidad de vida y nuestras condiciones económicas, porque lo hemos sentido hasta en el palo de la fregona.

La estadística de turno del INE (Instituto del Ninguneo a los Españoles) sobre Condiciones de Vida dice que la quinta parte de los ciudadanos vive bajo el umbral de la pobreza relativa y que la tercera parte sufre para llegar a fin de mes. También que uno de cada diez hogares se retrasa en el pago de la hipoteca y los recibos, lo que denota lo grave que es la situación porque, aunque antes daban hipotecas con facilidad, te hacían un estudio de morosidad para prevenir supuestas situaciones como ésta. Y mira ahora.

Los españoles hemos pasado de preocuparnos por el concurso de Miss España y la paz en el mundo a tener pesadillas con el IVA (en el papel de cangrejo pelotero), el paro (caracterizado como el Coco) y la hipoteca-vivienda (representado por el Monstruo del Lago Ness). Pero eso sí, este año hay Mundial de fútbol y que no nos toquen a la Roja, que hasta tiene un depósito en Banesto.

El INE calcula también que cada hogar ingresa de media 26.500 € pero que la renta media por persona no llega ni a 10.000 €. ¿Y así se puede vivir en un país desarrollado? ¿Así afrontaremos una colosal subida de impuestos en plena crisis? ¿Así nos vamos a recuperar y a comprar pisos? Menos mal que la ministra de casitas ha dicho que “objetivamente las condiciones para comprar son buenas”. ¿Mmmm?

Los ciudadanos de a pie, esos que sufrimos los atascos en coche y los apretones en el transporte público como si fuera el último día en La Tierra, nos sentimos impotentes de ver cómo no hay trabajo, no hay dinero y no hay esperanza para esta impotencia para la que ningún político tiene pastillita azul ni receta económica manque se nos echen encima las elecciones.

Ser de la clase media es un timo. Parece que vives genial, pero tu bienestar consiste en estar mirando siempre la pela. Y ser de la clase media es estar en peligro de extinción. Más de un tercio de la gente no podría pagar un imprevisto. Sí, ese tapar agujeros que todo el mundo menciona cuando fantasea sobre qué haría con un billete de lotería premiado. Pero permitidme que sea un poco mala y os diga que gran parte de la culpa la tenemos nosotros por creernos de otra clase social y de otra pasta sin pensar en ahorrar ni en las vacas flacas, actualmente anoréxicas.

Tampoco tenemos, algunos, pasta para las vacaciones porque en 2009 casi el 40% de la población no se pudo coger ni una mísera semanita. Espero que no sea tu caso y que, a pesar de que siempre suban en estas fechas la gasolina como si la dispensara el Rey Midas, ya estés camino de la casa del pueblo, la de tu tía Petri o la de un colega porque necesitamos desconectar ya de tantas cifras que no cuadran, de tanta angustia y tantas mentiras. ¡Feliz Semana Santa!

Carnaval de pisos y favelas

Mini-fistra Beatriz Corredor, aclamada en Brasil como Superwoman de Vivienda

Mini-fistra Beatriz Corredor, aclamada en Brasil como Superwoman de Vivienda

Partiendo de que todo lo que diga o haga la mini-fistra de Vivienda, Beatriz Corredor, me da más miedo que vergüenza, cuando se va de excursión es aún más peligrosa. Su último destino de peregrinación boy scout ha sido el V Foro Urbano Mundial que ONU-Habitat celebra en Río de Janeiro (Brasil).

Allí están encantados de “aprender” de lo ocurrió en España durante el boom inmobiliario, ése que nos estalló en la cara hace dos días y del que todavía no estamos seguros de haber salido a juzgar por los precios que siguen manteniendo algunas casas y por las políticas de rehabilitación que está fomentando la gobernanta de esta Vivienda.

Los brasileiros creen que podrán aprender de los errores y de los aciertos inmobiliarios de Spain en estos últimos años. Errores: mogollón, todos los que quieras, pero ¿aciertos? Os invito a enumerar alguno porque hasta las políticas mejor intencionadas como las VPO y la Renta Básica de Emanicipación están resultando ser un auténtico fiasco.

Qué tendrá que enseñar la Bea que tengan que aprender en Brasil, aún no me lo explico. Y qué tendrá que aprender España, con todos mis respetos, de un país lleno de favelas y, muy a su pesar y sus recursos, en vías de desarrollo. Nuestra Bea está emocionada con un programa brasileño llamado Mi casa, Mi vida que consiste en la construcción de un millón de casas para personas con pocos ingresos para poner un parche a las 6,3 millones de viviendas dignas que se calcula que necesita Brasil.

Lo que te digo. Es una iniciativa hermosa y necesaria pero no en España. Miedo me da que la Bea cogerá lo que le interesa, oyendo campanas distorsionadas que transformará en millones de euros para millones de viviendas que no necesitamos. Pero por Dios, si España lo que necesita es una receta para el stock de 1,1 millones de viviendas nuevas, ¡no para la sobreconstrucción! Aquí estamos hasta las cejas de pisos y limosnas.

Pero la peor parte no es el intercambio de experiencias y que Brasil y Bea cojan ideas de donde no deben, sino que se va a firmar un acuerdo de cooperación con la Caixa Económica Federal, el principal suministrador de hipotecas del país. Firmar, acuerdo y cooperación entre España y otro país, sobre todo si es latino y menos desarrollado, se traduce en que vamos a perder de vista muchos euros que se deberían destinar aquí, en el territorio nacional, para evitar que nos convirtamos en la nueva tragedia griega.

Se me olvidaba que ayudar y cooperar es progre. Lo es y también es bonito, generoso y necesario pero sólo cuando se puede porque la caridad bien entendida empieza por uno mismo, y no se puede ayudar cuando la UE te está sosteniendo con pinzas.

La única parte buena podría ser que la mini-fistra coloque a currar allí a los 1.300.000 parados de la construcción, siempre que estos estuvieran dispuestos a migrar a esta antigua colonia portuguesa con sabor a juerga y capoeira. O que trasplantara los pisos sin vender, los promotores frustrados, los que viven de la especulación y los que quieren enladrillarnos.

Así sí, pero está claro: entre samba y samba, la Bea mete la gamba.

A buenas horas mangas verdes

Trajes de faena sindical para sacar en manifestación cuando Gobierne el PP porque lo que es ahora... ¡¡No ganan para neftalina!!

Trajes de faena sindical para sacar en manifestación cuando Gobierne el PP porque lo que es ahora... ¡¡Se gastan todo el unte en naftalina!!

Queridos Reyes Majos:

Este año he sido buena (yo siempre soy buena, jejeje) pero… Ahora que pienso… ¡Qué desactualizada estoy, si ya pasó la Navidad! Me está pasando como a los sindicatos que, tras dos años de crisis (según Zapatillas no llegamos ni a uno y medio oficialmente), se manifiestan tarde, mal y para algunas cosas nunca. El espíritu de mi bisabuelo, espía de la Guerra de los Mundos, se manifestaba con más profusión en la vieja mansión que heredé de mi abuela.

Ahora a UGT de Madrid se le ocurre la gran idea de reivindicar, con un toque seudoburocrático, jipioso y alternata, que los parados deben tener ayudas para pagar la hipoteca y el alquiler, así como transportes gratis.

A mí me parece genial pero creo que también tenían derecho antes y nadie lo había reclamado. Creo que no hace falta esperar a cortarse un dedo para poner el cartel de peligroso ni para empezar a repartir tiritas o simplemente para empezar a decir que habría que reorganizar un comité de salvamento especial y urgente repartidor de tiritas. Entre otras cosas, cuando has terminado de pensar, redactar y promulgar, quien necesitaba la tirita se murió de la pena y del asco.

A los parados no sólo les hace falta ayuda para pagar la vivienda y los transportes, necesitan un plan A, B o C para encontrar trabajo (a ser posible de calidad, estable y relacinado con lo suyo aunque esto ya es hacer magia), y un sinfín de bla, bla, bla que es verdad pero que con ponerlo en una carta y reclamarlo mientras luego sigues con tu vida no es bastante.

Los sindicatos están para más que escribir cartas y tener buenas intenciones; para eso ya estamos todos, incluidas las misses que piden la paz en el mundo, que nadie muera de hambre y que aparezcan las armas de destrucción masiva. Los sindicatos están para remover conciencias (y no para acallar la propia con falsos argumentos como ahora), protestar cuando hace falta (y no callar como ahora), salir a la calle (en lugar de quedarse lisiado de tanto unte en casa como ahora), negociar convenios colectivos y en una palabra: trabajar.

Venden esta carta como una exigencia “rotunda e innegociable” mientras recalcan su “compromiso” con los parados. ¡Todo mentira! ¿Y qué pasa con los 4.600.000 y los que están escondidos entre los cursos del INEM y otros chanchullos? ¿Qué pasa con el sufrimiento de esas personas y sus familias? ¿Qué pasa con el mercado laboral? No tienen la culpa y no son los únicos que podrían hacer algo pero lo que podrían hacer no lo están haciendo.

Escribir cartas queda para los niños. Ya no es Navidad y los Reyes Magos no tienen poderes mágicos para solucionar el desempleo, que tampoco se soluciona solo. Cuando no se trabaja y se sufre el rechazo entrevista tras entrevista, que te ayuden a pagar el piso o el autobús está bien pero es una minucia y una pizca que solo pone una tirita en la economía doméstica.

Los parados son un colectivo triste y desamparado al que le falta organización y cohesión pero que seguiría a pies juntillas una manifestación no partidista o cualquier iniciativa que de verdad defendiera sus derechos como trabajadores que fueron, deberían seguir siendo y deberían volver a ser.

Esta Semana Santa buscaré alguna procesión interesante que ver porque las manifestaciones son un bien escaso que se limita a la protesta por el aumento de dos años de la edad de jubilación y para procesiones internas, ya tiene cada uno la suya.

En la cuerda floja

En el INEm están dando un curso de Equilibrismo para aprender a mantener el puesto de trabajo, llegar a fin de mes, pagar la hipoteca y evitar el embargo

En el INEM dan un curso de Equilibrismo para aprender a mantener el puesto de trabajo, llegar a fin de mes, pagar la hipoteca y evitar el embargo

Cada vez nos dan menos hipotecas y las que tenemos nos está costando Dios y ayuda pagarlas mientras hacemos equilibrismos con el resto de gastos sobre la cuerda floja de la que pende nuestro puesto de trabajo.

En enero, el número de hipotecas firmadas solamente ha aumentado el 0,97% con respecto a enero del año pasado. O sea, ni el pelo de un calvo. Si Zapatitos, Bea la guapi o súper Helen Salgado comentaran esta cifra dirían que todo va bien. No, perdón, ése era Aznar, dirían que hay signos de recuperación, porque lo de los brotes verdes ya está más trasnochado que una drag queen a los 40.

En realidad el número de hipotecas se ha estancado más que el agua donde chapotean los patos en los parques. El saldo total asciende a 1.096 billones de euros (¡con B!) que, dicho así, parece un montón, pero que en realidad es una birria porque baja la cifra de diciembre y se mantiene en la línea de los últimos meses, o sea, en torno al 1% de subida cuando antes se llegaba tranquilamente al 3,2%.

Como decía, cajas y bancos están en huelga de hipotecas caídas y con las que ya dieron en el pasado, con estudios de crédito hechos de vete a saber qué manera, estamos sudando la gota gorda y lo peor, lo que más cabrea y entristece a la vez, es saber que el 31% de los embargos podría haberse evitado con una reunificación de deudas.

A pesar de la versión pitufa del Euríbor que nos aplican ahora (ya va por el 1,1213%), el 37% de las familias no pueden pagar la hipoteca y la mitad de los encuestados por la Agencia Negociadora de Productos Bancarios reconoce que no llega a fin de mes.

Entretanto al Gobierno se le ha roto la caja de cambios y el agujero negro de su chistera negra se ha quedado sin fondo(s), sin chistes, sin gracia y sin truquitos caros o baratos con los que afrontar la crisis. Y para remendarlo nos intentará sacar de la manga 290 euros más al año, por supuesto ganando lo mismo, que es lo que calcula la OCU que nos costará a cada familia la subida del IVA.

Josep Oliu que, además de ser un señor catalán con pinta de abuelo  entrañable, es el presidente del Banco Sabadell opina que, permitidme trasladaros todo lo que dijo porque no tiene desperdicio, “quizá hay un 20% del sistema bancario que no está atendiendo su demanda de crédito, y eso es un problema. Pero el otro 80% la atiende. Los primeros son una parte pequeña del sistema, pero suficientemente grande como para que se note.”

¿No será al revés? ¿No será que el 20% nos hace caso y que el 80% nos ignora porque está más pendiente de una fusión, de vender el stock de pisos embargados y de contentar al Banco de España en sus exigencias que de prestarnos dinero?

Este hombre dice exactamente lo contrario de lo que es la situación actual:  dice que los bancos han reducido la morosidad, los pisos con una bajada del 25% se venden con “cierta” facilidad, se vuelven a vender pisos a unos precios adecuados, estamos en una etapa de normalización hipotecaria y otra serie de lindezas que no puedo reproducir sin que me dé un síncope, me suba el colesterol y se me disparen los triglicéridos.

¡Vaya semanita!

Beatriz en el Ministerio de las Mil Chorradillas

Beatriz, Elena y José Luis, en cónclave para (des)facer entuertos en nuestra maltrecha España

Beatriz, Elena y José Luis, conspirando en Cónclave de Fistros para (des)facer entuertos en nuestra maltrecha España

Al otro lado del espejo en el que cada mañana se mira la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, para preguntar quién es la más idiota del reino, hay un mundo más desquiciante y sicodélico que el imaginado por Tim Burton para su Alicia en el país de las maravillas.

Beatriz en el Ministerio de las Mil Chorradillas lleva una racha tan solo superable en inutilidad y retraso por el conjunto de medidas del actual Gobierno al completo.

Por un lado, no deja de dar la vuelta a España repartiendo millones de los que nos sacarán con el IVA para rehabilitar las viviendas que Elena SinSal Gado decidió que había que arreglar para sostener artificialmente los cimientos de la construcción, económicamente más derruidos que Chile y Haití juntos.

Por otro, ha tenido la caradura de decir en plena sesión de control parlamentario que los españoles solo dedicamos el 29% de nuestros ingresos (¡cómo si fuera poco!) al pago de la casa porque ha bajado el Euríbor y que, atención, “no escatimará esfuerzos” para que sigamos sin estos “agobios”. ¡Pero bueno!

Además de que es lo que marcan los cánones del endeudamiento, es evidente que ni ella ni su partido han tenido nada que ver porque aquí solo interviene la voluntad del Banco Central Europeo (BCE). ¡Que se deje de apuntar un tanto como si fuera suyo! Suyo sí es el descenso de los tipos de interés de las VPO pero ni era tan necesario ni tan justo porque agravia a los demás hipotecados, aunque se intente vender como lo contrario.

Y prepárate, porque la muy (te dejo elegir el adjetivo) ha confesado con cierto recochineo que su hipoteca no tiene suelo y le acaba de bajar 264 euros al mes. ¡Ah! Y que quien se quiera cargar su Ministerio debe ganar las elecciones primero.

Beatriz ha anunciado también, qué generosa, que este año se destinarán 375 millones de euros a la Renta Básica de Emancipación. ¿Emancipaqué? ¡Pero si a los jóvenes esa palabra ya ni les suena! Muchos llevan tanto esperar a cobrar las ayudas que están a punto de jubilarse. Esta ayuda viene con un servicio de información online que ha tardado dos años en ponerse en marcha y que ya tenían algunas comunidades autónomas.

Son tantas perlas que me podría hacer un collar y al lucirlo no se me verían ni las partes pudendas. Esta mujer habla mucho y hace poco, tarde y mal. Mi impresión es que para ocupar la cartera de Vivienda, Zetapé hace un casting en el que gana la que tiene sonrida profidén y cara de pava pero de las orejas para arriba, nada de nada.

Una cosa parece que ha hecho bien pero, obviamente, no ha podido ser idea suya: cambiar el código técnico de edificación para que los edificios sean accesibles para todo el mundo. ¿Va en serio? Será para que entre ella porque lo que tiene va camino de minusvalía permanente.

Se busca desenladrillador

¿Alguien ha visto brotes verdes en el ladrillo o en alguna parte?

¿Alguien ha visto brotes verdes en el ladrillo o en alguna otra parte?

¿No te has hartado de escuchar que el precio de la vivienda baja más que las caderas de Shakira? Yo sí y también de oír que tal o cual cifra es la refinitiva y que los pisos van a bajar más, que ya no pueden bajar más, que han tocado fondo y que éste es el mejor momento para comprar, entendiéndose por éste cualquier momento porque esta frase se ha convertido en más atemporal que las fotos de la Preysler.

Sin embargo, habrá que preguntar por qué a Iker Jiménez, parece que por fin el precio de los pisos tiende a estabilizarse de verdad en las grandes ciudades, o eso dice un experto al que otros tantos contradicen con el ya típico y tópico discurso de que el mercado inmobiliario aún tiene un largo camino por recorrer.

El Instituto Nacional de Cifras y Cotilleos Oficiales, más conocido como INE, media en el conflicto y asevera que el año pasado el precio de la vivienda solamente bajó de media un 4,3%, lo que resulta inexplicable con la que está cayendo por todas partes. No hay paraguas lo suficientemente grande e impermeable, fabricado en China o en el gurugú, que proteja a cualquier sector de la crisis pero el ladrillo se ha hecho un lifting y, con más padrinos que los Corleone, está aguantando como un campeón esta embestida.

Ojalá que ese camino por recorrer sume al 16% que ya se han abaratado, otro tanto hasta alcanzar el 30% que el FMI (organización donde todo el Futuro es Muy Incierto) calcula que deberían bajar. Miedo me da que fuera un ascenso  similar al que ya se atribuye a la vivienda nueva, de cuyo precio se especula que ha crecido por primera vez desde 2007. ¡Y dale con especular!

¿Pero cómo puede subir el precio de algo que sigue hipercarísimo y que no cumple expectativas de bajada tras el pinchazo de la burbuja? Lo que todavía no me entra en la cabeza es que los pisos no se hayan depreciado más, hasta niveles asequibles y en consonancia con el jornal que se han empeñado en mermarnos con la subida del IVA.

Tanto este impuesto como el precio de los pisos solo deberían subir en una economía en recuperación, no como la nuestra, tan maltrecha y herida como los antihéroes de las canciones de Sabina.

Entre los promotores, el Gobierno y las entidades financieras nos la están jugando. Con 1,5 millones de viviendas en stock y 1,3 millones de parados en la construcción ya va siendo hora de ponerse las pilas, ¿no?

En la costa todavía deberían bajar un 25% más si quieren que la gente al menos pregunte cuando lea el cartel, aunque los promotores inmobiliarios se encabezonan en que no van a bajar más ni en la costa ni en ninguna otra parte. Pues vale.

Tengo la bola de cristal en reparación pero si aceptas mi humilde consejo de espía compra cuando quieras, o más bien cuando puedas B.m. (Banco mediante), porque siempre habrá alguien que te diga que el precio ya se estancó y quien te diga que no seas pringao y te esperes porque seguirá bajando. ¿Hasta dónde? ¿Hasta cuándo?

Hasta el último insecto del hábitat más recóndito sabe que los precios estaban escandalosamente altos, que la especulación nos ha hecho más daño que un machete pero que, tristemente, no sabemos, ni podemos, ni queremos depender productivamente de otra cosa.

Ahí va un acertijo para este finde: el futuro está enladrillado, ¿quién lo desenladrillará? El buen deselandrillador que lo desenladrille, buen desenladrillador será.

Con el IVA en los talones

¡Corre, corre, porque sube el IVA, quitan la desgravación y todavía no te has comprado la casa!

¡Corre, corre, porque sube el IVA, quitan la desgravación y todavía no te has comprado la casa!

Ya sabemos que el Gobierno ha tenido la genial idea de eliminar la deducción por vivienda habitual a partir de enero de 2011, o sea en menos de 10 meses.

Suponemos que lo hace para reducir el trecho del dicho al hecho de quienes se plantean comprar una casa.

Podría ser una medida que cumpliera su objetivo sin perjudicar a nadie si no fuera porque los créditos, que antes se regalaban con las cajas de cereales, ya no te los dan ni con recomendación del Dalai Lama.

Es vox populi y muy preocupante que el Gobierno no encuentra ni el éxito ni el cartel de Exit en esta crisis, ni para marcharse ellos ni para que salgamos nosotros airosos. El único aire que se le ocurre es el de rehinchar a pulmón la burbuja inmobiliaria rehabilitando casas… ¡Ah! Y subiendo el IVA que, según la última genialidad de la ministra, por llamarla algo, de Vivienda no afectará a la compra de pisos. ¿Mmm? ¿Tú te comprarías una casa un 1% más cara que otra aun siendo idénticas? Yo no pero parece que no va a haber más remedio.

Que Beatriz Corredor me perdone si le llevo la contraria pero es que es de cajón que cuando un bien bastante caro, por muy de primera necesidad que sea, sube de precio, baja la demanda, máxime cuando hay inestabilidad laboral y dificultades para que te lo financien.

Subir el IVA del 7% al 8%  afectará a la compraventa de viviendas como está mandado, porque es lógico, porque la gente no tiene pasta, porque los créditos de vivienda atraviesan su peor momento desde 2001 y porque hasta en los libros de texto pone que cuando sube el precio disminuye la demanda.

Pues no, la mujer de las mil chorradas ha soltado una más: España es el país que tiene uno de los IVA más bajos de la Unión Europea. Y dale con la Unión Europea… ¿Tenemos la misma tasa de paro que la UE? ¿Tenemos los mismos sueldos que la UE? ¿Tenemos el mismo stock de viviendas que la UE? ¡Qué pesada con la UE!

Al menos reconoce que el Gobierno lo sube, a pesar de una moción de censura perdida por seis miserables votos, para llenar las arcas. Lo que no reconoce es que ingresará 200 millones de euros sólo con el IVA extra de los pisos, ese que ni se va a notar, ni que las tiene vacías por una política asocial e inconsistente que solo genera dependencia del Estado y dolores de muñeca de tanto poner la mano. Pero no preocuparse porque dentro de poco subvencionarán los fisioterapeutas con el cheque muñeca.

Esta mujer no se corta un pelo al animar a la gente a comprar piso, incluso en las inauguraciones de esos salones con nombre de trapitos demodé y vuelos baratos, porque el Coco subirá el IVA y la bruja avería quitará la desgravación de vivienda. ¿Para cuándo un anuncio con el perro Pancho animándonos a comprar papeletas para el sorteo de una casa protegida?

Reconozco que no le falta razón al afirmar que el Euríbor está bajo, aún quedan 9 meses de desgravación fiscal y la oferta de viviendas es brutal, sí, tan brutal que está acabando con nuestra economía. Que el Dalai reparta suerte porque yo he perdido mi pata de conejo en el último sorteo de VPO.

Libertad, igualdad, hipotequidad

Corredor guiando al pueblo hipotecado con VPO, desolado por sus tipos de interés

Corredora sin fondos guiando al pueblo hipotecado con VPO, desolado por sus tipos de interés

La estupi(n)dísima ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, acaba de decir que el Consejo de Ministros consiente que los 600.000 agraciados con una VPO antes de 2009 empiecen a pagar menos cuota de hipoteca, pasando de un 4,65% en los casos más extremos a una media del 3% de interés.

Hasta ahora, este misterio de ministerio marcaba un tipo de interés fijo con la concesión de la vivienda, lo revisaba cada año y santas pascuas. Ahora lo convierte en variable para que, en especial los amparados bajo el Plan 1998-2001 pero también los de planes posteriores (hasta 2009) puedan ver disminuida su cuota al estilo olé cómo baja el Euríbor que experimentan los préstamos del resto de casas.

Con su varita mágica para hacer agujeros negros en la cuentas, esta corredora sin fondos ha hecho un alto en su peregrinaje por el territorio nacional repartiendo más millones de euros (de esos que no tenemos) para rehabilitación de viviendas que Papá Noel juguetes en Navidad.

Y no se le han hecho carreras en las medidas al anunciar este bombazo tipo Hiroshima y Nagasaki con un tono falsamente social e igualitario, pues pregona que así los beneficiados con una VPO se aproximan, hasta casi equipararse en algunos casos, a los paganini de hipotecas de viviendas libres.

El supuesto agravio comparativo del que habla no es tal cuando se tiene en cuenta que muchos hipotecados están sufriendo cláusulas suelo, con los mismos tipos de interés que los dueños de VPO, y que estos ya ganaron la lotería de este tipo de viviendas por las que pagan bastante menos que el resto de los mortales.

Tongos y trifásicos aparte, recibir una VPO es un regalito del cielo que, aunque se pague a mayor interés que otro chabolo, es mucho más barato que los que quedan para los demás, también ahogados para pagar un techo bajo el que cobijarse.

La corredora sin fondos dice que los inquilinos de casas protegidas tienen menos ingresos que los que pagan hipotecas libres. ¿En serio? Las viviendas no protegidas tampoco te hacen libre sino que te atan al banco y, además, muchos de sus dueños tienen los mismos ingresos que los dueños de VPO pero no se presentaron al sorteo o no tuvieron tanta electrocución ni tanta suerte.

Que conste que me alegro mucho por los que ahora ven bajada la cuota de su hipoteca por vivienda protegida, pero no perdamos la perspectiva de que los vpoeros han estado pagando un interés por debajo del mercado cuando el Euríbor estaba por las nubes hace año y medio y sólo en este último periodo lo han pagado por encima del mercado, sin olvidar otro pequeño detalle: su vivienda siempre tiene un precio por debajo de mercado.

Zapatero a tus zapatos

ZuperParo y Super Salgado frente a la OCDE y frente a la crisis

ZuperParo y Super Salgado dando la cara en la OCDE para explicar su plan anticrisis

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) le ha tirado de las orejas al Gobierno español por seguir concediéndonos ayudas para comprarnos casa y porque dice que tardamos demasiado en resolver los conflictos entre inquilinos y propietarios de viviendas.

También nos ha echado la peta por otras cosas como no rebajar la indemnización por despido con contrato fijo, por no aumentar el periodo de cotización para las pensiones, vincular los salarios a la inflación y no ponernos las pilas con la reforma educativa.

Después de que no ha dejado títere con cabeza ni apartado socioeconómico en el que meter las narices, este selecto club de países ricos con nombre de partido político (aunque nunca lo haya sido) no quiere que sigamos jugando en su patio con nuestras reglas sino con las suyas.

La OCDE nos echa en cara que somos el país desarrollado que peor lleva y más sufrirá la crisis, con el único consuelo de que Irlanda va detrás, y que como sigamos así nuestro Producto Interior Bruto (PIB) irá para atrás como los cangrejos, deteriorándose un 10,6%.

Que la cosa nos va fatal lo saben hasta los linces de Doñana pero, digo yo, ¿es que la OCDE no tiene nadie más con quien meterse y no ha visto a Grecia? Creo que a pesar de que las rodillas se nos doblan, tenemos fisurado medio cuerpo y los dos ojos morados, los colegas de Pitágoras se llevan la palma en cuanto a farolillo rojo de esta liga tan selecta, o shea.

Como aquí lo que nos pone es llevar la contraria, si nos aconsejan suprimir las ayudas para la adquisición de vivienda, ahí va Super Salgado para decir que hay que dar más pasta para la rehabilitación. Pero no nos confundamos, el Gobierno sólo quiere reflotar el ladrillo, no ayudarnos a nosotros.

Siempre he prestado atención a los informes de la OCDE pero esta vez me paso por el sobaquillo todo lo que dice a excepción de la reforma educativa, cuya ausencia explica por qué una sociedad como la nuestra tiene los gobernantes que se merece.

Invito a los que se esconden detrás de esas siglas a coger un avión y darse un rulo por Spain para ver que es different y por qué hace falta la ayuda a la compra de viviendas, aunque las ayudas no sean la solución indefinida para nada. Lo preocupante es que parece que el precio ha tocado fondo y que, según quien haga el estudio, el número de hipotecas aumenta pero no nuestra liquidez ni nuestros ahorros. Es más, la gente que conozco no hace más que decirme que tiene el cerdito más tieso que la mojama.

A nadie le gusta que le pongan los puntos sobre las íes, lleve o no razón quien te lo diga, pero en esto podemos estar tranquilos porque ZuperParo ve menos que un gato de escayola y para salir de la crisis se está moviendo menos que el portero de un futbolín.

Deberíamos decirle a la OCDE: Zapatero a tus zapatos, pero no podemos porque es precisamente lo que ellos nos están diciendo a nosotros.